Son muchos los factores que influyen en el estado de nuestra piel (la edad, los factores externos de contaminación o humedad, las hormonas…), y entre ellos se encuentra la dieta
¿Podemos mejorar el estado de nuestra piel con la dieta? La respuesta es si.
Si tienes problemas de acné o exceso de sebo, debes moderar en tu dieta los alimentos ricos en azúcar y grasas saturadas y trans, que se encuentran en abundancia en bollería y repostería industrial. Los productos lácteos y los cereales refinados también pueden empeorar este problema. En cambio debes aumentar el consumo de frutas y verduras y cereales integrales. Sobre el chocolate, que siempre se ha asociado a la aparición de granos, no se ha demostrado de forma rigurosa que sea causa de acné.
Para la piel en la que se notan pequeñas líneas de expresión y falta de luminosidad, debes beber diariamente unos 2 litros de agua, aumentando esta cantidad si haces deporte o hace mucho calor, y al igual que en el caso anterior, eliminar grasas saturadas y azúcar y aumentar la ingesta de frutas y verduras.
Hay alimentos con propiedades antioxidantes, que pueden retardar el envejecimiento cutáneo. Entre estos alimentos nos encontramos el té verde, frutas, entre las que están los frutos rojos, las uvas y los cítricos, y verduras como el tomate o brócoli.
En general, para mantener nuestra piel sana, debemos mantenernos hidratados y seguir una dieta rica en frutas, verduras y alimentos integrales y moderar el consumo de grasas trans y saturadas , azúcar y cereales refinados.