En las recetas tradicionales, las albóndigas se fríen. Hoy os proponemos una receta en la que las albóndigas se hornean, con lo cual reducimos bastante el contenido en grasa del plato. Además utilizamos queso desnatado y carne magra, por lo que se trata de un plato perfecto para dietas de adelgazamiento o para personas que deben seguir una dieta baja en grasa.
Ingredientes para 4 personas:
- 800g de mezcla de filete de ternera y lomo de cerdo picados
- Una cebolla grande
- 2 dietes de ajo
- 1 huevo grande
- Un calabacín grande
- 4 zanahorias
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
Preparación:
Partimos la cebolla por la mitad. Una mitad la reservamos y la otra la picamos muy finamente junto con uno de los dientes de ajo. Lo pochamos todo en una cucharada de aceite hasta que la cebolla esté transparente.
Mezclamos la carne con la cebolla y el ajo pochados y el huevo, salpimentamos y mezclamos todo. Damos forma a la albóndigas y las ponemos en una fuente de horno sobre papel de hornear. Horneamos a 180-200º durante unos 20 minutos (depende un poco del tamaño de las albóndigas)
En una cazuela ponemos un chorrito de aceite (unas 4 cucharadas soperas) y pochamos la otra mitad de la cebolla, el diente de ajo, la zanahoria y el calabacín todo muy picado (podemos utilizar una picadora para que quede más fino). Cuando tengamos las verduras casi cocinadas, ponemos 2 vasos de agua y cuando empiece a hervir introducimos las albóndigas. Dejamos cocinar todo unos 15 minutos y ponemos 2 ó 3 cucharadas de queso para espesar y ligar la salsa y dejamos que se cocine todo 5 minutos más.
Sobre el plato:
Acompañando las albóndigas con algún cereal (arroz, quinoa, pasta…) tenemos un plato completo y equilibrado.
Aunque las carnes utilizadas para elaborar el plato son carnes magras, conviene limpiarles bien la grasa antes de picarla, por lo que es mejor que la piquemos en casa en lugar de que nos la piquen en la carnicería.
Esta es una receta con un contenido moderado en grasa, por lo que resulta ideal para dietas hipograsas.